Torres del Paine es uno de los paisajes más admirados del mundo, pero más allá de sus cumbres y senderos más conocidos existe otra Patagonia: silenciosa, remota y viva. Una reserva de conservación donde la naturaleza se regenera y la fauna vuelve a habitar el territorio. Un lugar para conectar de forma más personal con el entorno, sin prisa, con tiempo para uno mismo.
Desde Base Torres hasta el glaciar Grey, y mucho más allá, descubre una nueva perspectiva del parque nacional. Te invitamos a explorar no tan solo los lugares más icónicos, sino también su lado menos transitado: más salvaje y silencioso. Una experiencia íntima con un lado de la Patagonia que pocos llegan a vivir.
Todas nuestras exploraciones te llevan más allá de lo esperado: desde los clásicos del parque hasta rutas diseñadas exclusivamente por Explora. Hay múltiples opciones para recorrer senderos poco transitados, valles, bosques y la estepa característica de la Patagonia. Cabalga junto a nuestros gauchos desde nuestras propias caballerizas y descubre el lado más íntimo de Torres del Paine.
Explorar desde nuestra reserva te permite acceder directamente a las cumbres esculpidas de Sierra Baguales, uno de los paisajes más sorprendentes del sector. Es también uno de los mejores lugares para observar fauna silvestre, incluidos los pumas que habitan la zona. Además, nuestra red de senderos autoguiados ofrece la posibilidad de salir por tu cuenta y vivir momentos de descubrimiento personal.
Cada tarde, nuestros guías te ayudarán a planificar y elegir tu exploración del día siguiente, basada en tus intereses y nivel de exigencia. Las salidas se realizan en grupos pequeños para mantener un ambiente más cercano y personalizado.
En Torres del Paine, el equipo de Explora reúne guías formados en nuestra propia Escuela de Guías, guardaparques de Explora y gauchos locales que crecieron cabalgando este territorio. Más que expertos, son anfitriones: traen a cada jornada la cultura, el conocimiento y el ritmo del lugar.
Comparten una pasión inquebrantable por la vida al aire libre y una conexión íntima con los paisajes que exploramos. Al mismo tiempo, comprenden la fragilidad de estos ecosistemas únicos y comparten nuestro compromiso con su conservación.